¿Qué es el edge computing?

El conocido como internet de las cosas tiene un serio problema con la generalización, es decir, compartir datos de usuario a escala global, sin filtros, sin fronteras, sin especificaciones propias del lugar, del momento, del ámbito de actuación, etc.

Para compensar eso, surge edge computing, que aporta proximidad y confianza. Porque todos los datos, toda la información que el usuario genera en su día a día, y lo que ello va a provocar después, se genera en un entorno absolutamente cercano.

Ya no se trata de volcar todos nuestros datos, toda nuestra información, todos nuestros registros en una nube genérica, anónima, universal. Se trata de hacerlo dentro de un espacio compartido en el que la proximidad es fundamental para poder establecer nuevos desarrollos beneficiosos para el usuario, que reconoce el entorno en el que se maneja y confía en él.

Lo mismo que los grandes cocineros empiezan a reivindicar los productos de proximidad para sus elaboraciones gastronómicas, así opera el edge computing, buscando redes y nubes cercanas, no generalistas, para garantizar más seguridad y una mayor tranquilidad en el usuario.

Ejemplos de edge computing

¿Te suenan nombres como Alexa o Siri? Son ayudantes fantásticas para ofrecerte información al minuto sobre un montón de temas variados. Cuando tú preguntas a uno de los dispositivos en los que Siri o Alexa trabajan “qué tiempo va a hacer hoy”, no te dan una clase magistral sobre meteorología. Te cuentan, con precisión, el tiempo que va a hacer en tu pueblo, en tu ciudad o en tu entorno más cercano en las próximas horas. En eso se basa, fundamentalmente, el edge computing.

¿Qué otros usos puede ofrecerme el edge computing?

Cada vez más. Sólo necesitas tener imaginación y la tecnología adecuada para hacerlos realidad. Te pongo algunos ejemplos:

• Los coches inteligentes. Se conducen solos. Reciben información al instante del mapa de la ciudad por el que transitan, del tráfico existente en cada momento, de la situación de los semáforos, de las incidencias puntuales (obras, accidentes, cortes de calles…)
• Los agricultores. Sabiendo cuándo es el momento ideal para regar sus campos, pueden programar sus aplicaciones de riego en función de una serie de variables (temperatura, humedad, etc…) que se producen en su entorno más cercano y, por tanto, más fiable.
• La industria. Un producto final requiere de muchos procesos previos e independientes. Tener el control absoluto de la situación de cada uno de ellos en cada momento es garantía de conseguir resultados óptimos en la cadena de producción o, en caso contrario, de detectar los problemas sobre la marcha y poder buscar la mejor solución al respecto. 

¿Tiene inconvenientes el edge computing?

Si quieres aplicarlo o vas a trabajar en un entorno local, el edge computing no tiene ninguna desventaja. La cercanía es sinónimo de seguridad. Pero si tu intención es interactuar en escalas geográficas más extensas, todo este tipo de conexiones de redes locales no te servirán para ofrecerte ese panorama más global que seguramente necesites.

Sólo es cuestión de conocer nuestros objetivos y de saber utilizar las herramientas necesarias de manera adecuada.